Optional sidebar menu
Social media
Contact information
Address

5th Avenue, New York - United States

Email

hello@webpixels.ro

Phone

+10 724 1234 567

 

Algunos temas bíblicos

A     B     C     D     E     F     G     H     I     J     K     L     M     N     O     P     Q     R     S     T     U     V     W     X     Y     Z    
Q ... / rápido para escuchar y lento para hablar

rápido para escuchar y lento para hablar

Proverbios Capítulo 10:19

En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente.

Proverbios Capítulo 12:15

El camino del necio es derecho en su opinión; Mas el que obedece al consejo es sabio.

Proverbios Capítulo 15:1

La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor.

Proverbios Capítulo 15:28

El corazón del justo piensa para responder; Mas la boca de los impíos derrama malas cosas.

Proverbios Capítulo 16:32

Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.

Proverbios Capítulo 17:27

El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido.

Proverbios Capítulo 17:28

Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es entendido.

Proverbios Capítulo 18:2

No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra.

Proverbios Capítulo 18:13

Al que responde palabra antes de oír, Le es fatuidad y oprobio.

Proverbios Capítulo 21:23

El que guarda su boca y su lengua, Su alma guarda de angustias.

Proverbios Capítulo 29:20

¿Has visto hombre ligero en sus palabras? Más esperanza hay del necio que de él.

Eclesiastés Capítulo 5:2

No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras.

Efesios Capítulo 4:29

Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.

Efesios Capítulo 4:32

Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.

Santiago Capítulo 1:19

Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;

Santiago Capítulo 1:20

porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.

Santiago Capítulo 3:1

Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.

Santiago Capítulo 3:2

Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

Santiago Capítulo 3:3

He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo.

Santiago Capítulo 3:4

Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere.

Santiago Capítulo 3:5

Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!

Santiago Capítulo 3:6

Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.

Santiago Capítulo 3:7

Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana;

Santiago Capítulo 3:8

pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal.

Santiago Capítulo 3:9

Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios.

Santiago Capítulo 3:10

De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.

Santiago Capítulo 3:11

¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga?

Santiago Capítulo 3:12

Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce.

Santiago Capítulo 3:13

¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre.

Santiago Capítulo 3:14

Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad;

Santiago Capítulo 3:15

porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica.

Santiago Capítulo 3:16

Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa.

Santiago Capítulo 3:17

Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.

Santiago Capítulo 3:18

Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz.