Optional sidebar menu
Social media
Contact information
Address

5th Avenue, New York - United States

Email

hello@webpixels.ro

Phone

+10 724 1234 567

 

Algunos temas bíblicos

A     B     C     D     E     F     G     H     I     J     K     L     M     N     O     P     Q     R     S     T     U     V     W     X     Y     Z    
J ... / unirse al ejército

unirse al ejército

Deuteronomio Capítulo 20:1

Cuando salgas a la guerra contra tus enemigos, si vieres caballos y carros, y un pueblo más grande que tú, no tengas temor de ellos, porque Jehová tu Dios está contigo, el cual te sacó de tierra de Egipto.

Deuteronomio Capítulo 20:2

Y cuando os acerquéis para combatir, se pondrá en pie el sacerdote y hablará al pueblo,

Deuteronomio Capítulo 20:3

y les dirá: Oye, Israel, vosotros os juntáis hoy en batalla contra vuestros enemigos; no desmaye vuestro corazón, no temáis, ni os azoréis, ni tampoco os desalentéis delante de ellos;

Deuteronomio Capítulo 20:4

porque Jehová vuestro Dios va con vosotros, para pelear por vosotros contra vuestros enemigos, para salvaros.

Josué Capítulo 1:9

Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

Salmos Capítulo 20:6

Ahora conozco que Jehová salva a su ungido; Lo oirá desde sus santos cielos Con la potencia salvadora de su diestra.

Salmos Capítulo 20:7

Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria.

Salmos Capítulo 108:12

Danos socorro contra el adversario, Porque vana es la ayuda del hombre.

Salmos Capítulo 108:13

En Dios haremos proezas, Y él hollará a nuestros enemigos.

Isaías Capítulo 41:10

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

Juan Capítulo 15:13

Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.

Romanos Capítulo 13:1

Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas.

Romanos Capítulo 13:2

De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.

Romanos Capítulo 13:3

Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella;

Romanos Capítulo 13:4

porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo.

Romanos Capítulo 13:5

Por lo cual es necesario estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia.

Romanos Capítulo 13:6

Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto mismo.

Romanos Capítulo 13:7

Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra.

Romanos Capítulo 13:8

No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.

Romanos Capítulo 13:9

Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

Romanos Capítulo 13:10

El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.

Romanos Capítulo 13:11

Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos.

Romanos Capítulo 13:12

La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz.

Romanos Capítulo 13:13

Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia,

Romanos Capítulo 13:14

sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.